La Libertad un derecho de todos


Trabajo Final


Articulo Creado por: Raul Mosquera Serrano

RESUMEN

 

El presente ensayo aborda de manera clara los objetivos ambiciosos que los ministros de Educación Iberoamericanos adoptaron como decisión que puede ya considerarse como histórica.

Mejorar la calidad y la equidad en la educación para hacer frente a la pobreza y a la desigualdad y, de esta forma, favorecer la inclusión social. Se trataba de abordar con decisión, y de una vez y para siempre, retos aún no resueltos: analfabetismo, abandono escolar temprano, trabajo infantil, bajo rendimiento de los alumnos y escasa calidad de la oferta educativa pública. Y se pretendía hacerlo con la voluntad de enfrentarse, al mismo tiempo, a las demandas exigentes de la sociedad de la información y del conocimiento: incorporación de las TIC en la enseñanza y en el aprendizaje, apuesta por la innovación y la creatividad, desarrollo de la investigación y del progreso científico. Era necesario caminar deprisa y con valentía para estar en los primeros vagones del tren de la historia del siglo XXI.

Nos encontramos, pues, con un proyecto ampliamente aceptado, que ha generado enormes ilusiones y expectativas entre aquellos países, gobiernos, grupos sociales y ciudadanos que creen en la capacidad transformadora de la educación y que consideran que estamos en la década decisiva para saldar la deuda histórica contraída con millones de personas. Es, sin duda, un tiempo de esperanza, pero también de responsabilidad y de compromiso para una comunidad iberoamericana en construcción desde los cimientos de la libertad, la igualdad y el desarrollo.

Palabras claves: Sistema educativo, computadoras, currículo, enseñanza y de aprendizaje

 

ABSTRACT

This essay clearly addresses the ambitious goals Iberoamerican Ministers of Education adopted as a decision that can now be considered historical.

Improving quality and equity in education to address poverty and inequality and, thus promoting social inclusion. It was addressed decisively and once and forever, unresolved challenges: illiteracy, early school dropout, child labor, low student achievement and poor quality of public education provision. And he intended to do with the willingness to confront the same time, to the exacting demands of the information society and knowledge: incorporation of ICT in teaching and learning, commitment to innovation and creativity development research and scientific progress. It was necessary to walk quickly and boldly to be in the first wagon train XXI century history.

We are, therefore, widely accepted a project that has generated huge hopes and expectations among those countries, governments, social groups and citizens who believe in the transformative power of education and consider that we are in the decisive decade to pay off debt historical owed ​​to millions. It is certainly a time of hope, but also of responsibility and commitment for a Latin American community under construction since the foundation of freedom, equality and development.

Keywords: Education system, computers, curriculum, teaching and learning

 

LA FACTIBILIDAD DEL LOGRO DE CADA UNA DE LAS 11 METAS PLANTEADAS EN METAS EDUCATIVAS 2021

 

Raúl Mosquera Serrano, Ingeniero de Sistemas, Tutor, UNAD, raul.mosquera@unad.edu.co

 

Se presenta este ensayo en el cual se analizó el libro: “Metas Educativas 2021. La Educación que Queremos para la Generación de los Bicentenarios” (OEI, 2009). Ni siquiera es necesario aclarar que la lectura del libro la inicié guiado por el módulo del curso (González, 2012), puesto que éste remite, principalmente en el Tercer Capítulo a aquel. No obstante, también abordó el tema de la educación desde textos de otros autores y tomando algunos materiales complementarios. De otra parte, lo que aquí se presenta también aparece en el Foro de Trabajo Final, en el cual cada estudiante presentó aportes y el correspondiente ensayo final, éste último también se presentó, de manera individual en el espacio habilitado para tal fin [el vínculo Tarea].

Metas Educativas 2021 [en lo que sigue: MED 2021] está organizado de forma que –en el Cuarto Capítulo (pp. 49 – 59) se plantean 11 Metas Generales [MG], dentro de las cuales están contenidas 28 Metas Específicas [ME], para cuya verificación se presentan 38Indicadores de Logro y un número todavía mayor de Niveles de Logro enfocados a dichos indicadores.

Quizá la preocupación principal es la factibilidad del logro de cada una de las 11 metas planteadas en MED 2021; por ejemplo, la MG 1ª (p. 49)1 sólo será realizable si se capacita aquellas franjas poblacionales que por distintos motivos no han tenido acceso a la educación o que no están suficientemente capacitados para la coparticipación en el logro de los objetivos; si bien es cierto que en Colombia se han alcanzado pequeños logros en materia de inclusión de población vulnerable, como se evidencia en la acogida y facilidades de acceso a la Educación Superior de comunidades indígenas, afro descendientes, comunidades, personas víctimas de desplazamiento forzado, etc., para el caso de la franja poblacional adulta que es analfabeta –que siquiera es cada día más pequeña–, así como para el caso de los adultos entre 25 y 55 años de edad que apenas cursaron la primaria –unos– o la secundaria –otros–, deben diseñarse programas educativos y formativos que les permitan participar activamente en la formulación de proyectos a través de los cuales se medirán los logros de nivel alcanzados para el Indicador 1 (p. 49), de lo contrario, todos los proyectos que engrosarán la lista de espera para ser aprobados serán presentados por leguleyos, académicos e intelectuales sin que esta primera Meta General llegue a cumplirse de manera equitativa o, llegando a cumplirse en cuanto al mencionado indicador de manera parcial.

En materia de alfabetización, en Colombia se cuenta con el Programa Nacional de Alfabetización [PNA], no obstante, éste se queda corto para los requerimientos que se le hacen; eso sumado a la laxitud en la definición de las metas a alcanzar hacen presumir que el fenómeno de la población iletrada se prolongará todavía un tiempo; Por ejemplo, para el 2010 el índice de personas iletradas de 15 años y más, era del 6.7%, el Gobierno se propuso reducir dicho fenómeno en apenas dos puntos porcentuales [6.5%] para el año 2011 (cf. Informe del Presidente al Congreso de la República, 2011). El caso es que ya no debiera haber persona alguna menor de edad en esta situación y, los niveles de logro deberían ser más agresivos para eliminar este fenómeno en los márgenes etarios que se reseñaron arriba [población entre 25 y 55 años]    

Según se explicó en su momento, la falta de delimitación en cuanto a que todos los sectores, incluyendo población analfabeta, deben poder participar –de una u otra forma– en la formulación de proyectos, pero, no sólo eso, también de su posterior aprobación, pondría llanamente en riesgo de no cumplimiento la MG 1ª. Entonces, ¿será la MG 1ª la única en riesgo de no llegar a feliz término o cuáles de las otras metas están en la misma condición?

Con esto en mente comienza a rondar la certidumbre de que Las metas planteadas en MED 2021 no se cumplirán, o quién sabe en que porcentaje se alcanzarán. Luego: cómo hacer para que en MED 2021  se supere la retórica del papel y se pase a los hechos… Qué podemos aportar los estudiantes universitarios colombianos al logro de los indicadores, sino podemos superar las fronteras nacionales, al menos que contribuyamos en nuestro propio país.

En cuanto a la MG 2ª y, más concretamente en relación con la ME que lleva el mismo numeral [2] y con el Indicador 2º [2] (MED: 2012, p. 50), se pone en evidencia lo endeble que resulta la adhesión de Colombia a este tipo de protocolos internacionales de verificación de la calidad de vida, dado que el Nivel de Logro allí incluido se propone que para el 2015 el 30% de la población por debajo del umbral de pobreza recibirá algún tipo de ayuda económica (p. 50). Bueno, pues, para la consecución de la reducción de los índices de pobreza el Gobierno Nacional adoptó una estrategia trampera consistente en realizar una Tercera Encuesta SISBEN, tras lo cual están ubicando a la población perteneciente a los estratos bajos [0, 1 y 2] por encima de lo que corresponde, con tal de presentar niveles de logro que soporten los indicadores, así en la III ENCUESTA SISBEN la población que estaba en nivel cero [0] ha pasado al primero [1º], los del primer nivel [1º] al segundo [2º] y así sucesivamente. Como se sigan presentando este tipo de artimañas por parte del Ejecutivo Nacional –que de forma articulada con los entes territoriales pretende que las familias de escasos recursos se las arreglen como puedan para enviar a sus hijos al colegio– no va ser posible que en Colombia la educación contribuya a la superación de la pobreza, la indigencia y el hambre.

Para concluir, si tras el análisis aquí presentado se probó que las dos primeras MG de 11 postuladas no se van a cumplir, puesto que ya se truncaron por diversos factores, entre otros la burocracia con la que fueron definidas, las estrategias del gobierno de turno y decidía, la hipótesis planteada en el foro del Trabajo Final se comprueba de forma alarmantemente temprana: Las metas planteadas en MED 2021 no se cumplirán.


1 “REFORZAR Y AMPLIAR LA PARTICIPACIÓN DE LA SOCIEDAD EN LA ACCIÓN EDUCADORA” (OEI, texto ya citado).

2 Porcentaje de familias con dificultades socioeconómicas que reciben apoyo para garantizar la asistencia habitual de sus hijos a las escuelas (Metas Educativas, 2021, p. 50).


REFERENCIAS

González, M. A. (2012). Módulo. Contextos Políticos y Educativos en América Latina. S. l., Colombia: Unad.

Misas, M. O. (2009). Cultura Política [para posgrado]. La Cultura Política: Mitos y Realidades.s.l, Colombia: Unad.

Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura [OEI]. (2009).2021 Metas Educativas. La Educación que Queremos para la Generación de los Bicentenarios. Documento Final. Síntesis. Madrid, Com. Auton., España: OEI.

Presidencia de la República de Colombia. (julio de 2011). Informe del Presidente Juan Manuel Santos al Congreso de la República. Bogotá, D. C, Colombia: Departamento Nacional de Planeación.


RESUMEN.

En el proceso de educación intervienen muchos actores  padres de familia,  medios de comunicación, empresas productivas e industria, deben pues complementar y reforzar la labor del sistema escolar.

Una política educativa no se reduce entonces a los establecimientos y ni siquiera al sistema educativo más bien consiste en un conjunto de principios, metas, y estrategias que enmarquen las acciones del estado de las escuelas públicas y privadas de las comunidades del sector productivo y de la sociedad civil en general.

Un proyecto nacional capta muy bien la primera condición para afrontar nuestro desafío del siglo XXI. Una educación de calidad para todos los latinoamericanos y caribeños; después de revisar los esfuerzos que hoy adelantan,  muchos de la región acaban de concluir que no es fácil mejorar la educación o el sistema educativo.

En palabras de Ernesto Sábato: “Evitemos el error de reformar la educación como si se tratara de un problema  Meramente técnico y no el resultado de la concepción del hombre que le sirve de  Fundamento”. Esta concepción del ser humano tiene que ser explícita, debatida y  Apropiada por todos, si es que se trata de una educación democrática.  La política educativa es, por definición, una política de largo plazo. Ahora bien: bajo un régimen democrático, la única manera de asegurar la continuidad de las  políticas es dotarlas de una legitimidad sólida y una base de apoyo social amplio,  bien informado y dispuesto a defenderlas.

Palabras Claves: Sociedad, Valores, Cultura, Familia, Aprendizaje, Educación, Estado, Sistema.

ABSTRACT

 

In the process of education involving many actors parents of family, media of communication, companies productive and industry, should as complement and strengthen the work of the system school.

A policy educational not is reduces then to the establishments and or want to the system education more well is in a set of principles, goals, and strategies that framed the actions the state of the schools public and private of the communities the sector productive and of the society civil in generally.

A project national captures very well the first condition to cope our challenge the century XXI. An education of quality to everyone the American and Caribbean; after revise the efforts that today advance, many of the region just concluded that it is not easy to improve education or the system education.

In the words of Ernesto Sabato: "Let us avoid the mistake of reform education as if it were a problem purely technical and not the result of conception the man that serves of foundation”. This conception of the human have to be explicit, Appropriate debated by everyone, if it is an education democratic. The policy educational is, by definition, a policy of long term. Now well: under a regime democratic, the only way to ensure continuity of policies is provide them legitimacy solid and broad base of support, knowledgeable and willing to defend.

Keywords: Company Values, Culture, Family, Learning, Education, State, System.

 

HACIA UNA NUEVA POLÍTICA EDUCATIVA

 

Sandra Milena Ortiz Mendivelso, Técnica en Contabilidad y Psicóloga, Laboro: Empresa Propia y Docente. sandramilor@hotmail.com

 

“El objetivo principal de la educación es crear personas capaces de hacer cosas nuevas, y no simplemente repetir lo que otras generaciones hicieron”

» Jean Piaget

 

Desde que Deng Xiaoping admitió que “no importa si es blanco o negro, con tal  que cace ratones”, la otrora ácida controversia entre partidarios acérrimos de la  estatización y defensores de la privatización a ultranza, en realidad perdió mucho  de su sentido. No hay una disyuntiva tajante entre educación pública y educación  privada. Hay valores y metas educacionales cuyo cumplimiento tiene que asegurar

La sociedad bajo la égida del Estado; algunos de estos valores y metas quedan  mejor protegidos cuando la gestión está en manos privadas, otros lo son cuando la  gestión es pública.

            Y en todo caso hay que advertir que “Estado” no es sinónimo de “burocracia”, así como “iniciativa privada” no es sinónimo de “abuso”. Además de las escuelas estatales y particulares, en el proceso de educar intervienen muchos otros actores. Padres de familia, medios de comunicación, empresas productivas e industrias de la cultura deben pues complementar y reforzar la labor del sistema escolar para lograr el cumplimiento adecuado de las funciones sociales e individuales de la educación. Una “política educativa” no se reduce entonces a los establecimientos oficiales, y ni siquiera al sistema educacional. Más bien consiste en un conjunto de principios, metas y estrategias que enmarquen las acciones del Estado, de las escuelas públicas y privadas, de las comunidades, del sector productivo y de la sociedad civil en general. En tal acepción amplia, la “política educativa” es en realidad el tema de los tres capítulos siguientes.

En éste nos limitamos a enunciar las principales directrices, cuyo alcance se irá precisando en los contextos específicos de la educación básica y media  la formación para el trabajo  y la preparación de la alta inteligencia  Las directrices en cuestión aluden a cinco materias: (a) La construcción de un consenso nacional; (b) El papel del Estado; (c) La eficacia de las políticas, (d) El financiamiento, y (e) La administración del sistema educacional.

 Un proyecto nacional. Sólo los realistas pueden soñar. Este grafitti (“pintada”, como ordena la Academia) estudiantil de los años 60, capta muy bien la primera condición para afrontar nuestro desafío del s. XXI: una educación de calidad para todos los latinoamericanos y caribeños. Después de revisar los esfuerzos que hoy adelantan muchos países de la región,  acaba de concluir que “no es fácil mejorar la educación o el sistema educativo”. Y en efecto, sería ingenuo subestimar la tensión entre objetivos diversos, el cúmulo de intereses creados  y la limitación de recursos que inevitablemente se atraviesan en el camino de cambios tan ambiciosos y tan complejos. Por trivial que parezca el punto, son muchos los proyectos educativos que nacen muertos porque ignoran (o porque quieren ignorar) la “correlación de fuerzas” que existe en la sociedad y en el momento dados. De aquí que un diagnóstico acertado de la situación y, sobre todo, una lectura inteligente de las posibilidades y de los obstáculos que implica, son requisitos si no qua non para que la política educativa pueda conducir a alguna parte.

Al lado de aquellas tensiones, resistencias y escaseces, hay por supuesto que leer  los factores positivos. Unos y otros dependen de cuál sea el país y cual la  coyuntura, de suerte que aquí puede decirse muy poco al respecto. En términos  generales sin embargo, vale aludir a ciertas circunstancias recientes que tienden a  facilitar el nuevo proyecto educativo en toda o en casi toda Latinoamérica y El  Caribe. Entre estas circunstancias favorables, la primera y más importante es la  presión de la historia: la sociedad global del conocimiento se nos vino encima, y el  educarse para ella no es un acto piadoso sino una necesidad vital de nuestros  países. En segundo lugar está la fuerza inatajable de la tecnología; hay una  revolución en las comunicaciones y la informática que llegará sin remedio al  aprendizaje y a la educación. En tercer lugar, el empuje conjunto de la  globalización y la tecnología ya está dando paso a un cierto descongelamiento de  los intereses particularistas que asfixian al sistema educativo; es el caso del político  clientelista frente a la “reingeniería” del Estado, el caso de la industria protegida  frente a la apertura comercial, el caso del sindicalismo estrecho frente a la  enseñanza desescolarizada y la crisis fiscal. En cuarto lugar, está el poder de las  ideas mismas, la “nueva ideología” global que acentúa el papel de la educación y  la necesidad de ponerla a tono con los tiempos. Y último pero quizá más decisivo,  está el viento de la democracia política en todo el subcontinente, cuyo impulso se extiende a la educación porque ella es el derecho fundamental en una sociedad del conocimiento.

Entre menos favorable sea la “correlación de fuerzas” dentro del país, más  cuidadoso habrá que ser en el diagnóstico y más inteligente en el diseño de las  estrategias. Pero no menos decidido en la intensidad del esfuerzo ni en la dirección final de las reformas. La transformación educativa es una necesidad prioritaria de América Latina y el Caribe; a esa prioridad hay que apostarle, aún si fueran pocas las probabilidades de éxito; sólo que en este evento habría que apostar con más lucidez, más tino y más decisión aún.

La lucidez principia por tener claro el rumbo. En palabras de Ernesto Sábato:  "Evitemos el error de reformar la educación como si se tratara de un problema  meramente técnico y no el resultado de la concepción del hombre que le sirve de  fundamento" . Esta concepción del ser humano tiene que ser explícita, debatida y  apropiada por todos, si es que se trata de una educación democrática.  Por convicción y por estrategia, el primer y mayor esfuerzo debe pues dirigirse a  gestar una voluntad política muy potente, a construir un gran consenso nacional  alrededor de la educación, a forjar un mandato popular con energía y nitidez  bastantes para que el proceso sea duradero y capaz de vencer las resistencias. Si la educación va a convertirse en el proyecto público de América Latina y El Caribe,  habrá necesidad de una pedagogía popular que lo sustente, de un diálogo paciente  y transparente, de un centro de gravedad efectivo hacia donde converjan los  distintos actores y sectores en función de intereses genuinamente colectivos.  El gobierno, los dirigentes y partidos políticos, la sociedad civil y el “tercer sector”,  los padres de familia y las comunidades locales, los maestros y las empresas  privadas, los sindicatos y las iglesias, los medios de comunicación, los académicos y los organismos internacionales, deben suscribir el pacto que constituya la educación de calidad para todos en la real prioridad de cada país.

Es posible distinguir cinco fases en el “ciclo de vida de las reformas educativas” las etapas de conceptualización, ejecución piloto, movilización, extensión e  institucionalización. La conceptualización se nutre ordinariamente de la literatura   Citado por J. C. Hidalgo (1996).

La  ejecución piloto tiene carácter experimental, aunque supone algún ingrediente de  capacitación y desarrollo institucional. La fase crítica es la de movilización, pues  aquí se define el grado de legitimidad y de apoyo político que tendrá el proyecto es  decir, su intensidad, su profundidad y su duración eventuales. Las etapas de  extensión e institucionalización cosechan aquella siembra y almacenan su fruto con mayor o con menor acierto; pero un aspecto clave de la institucionalización exitosa es asegurar la presencia y la vigilancia constante de los usuarios en cuyo nombre se adelantó la reforma.

Así que la política educacional no puede seguir encerrada entre el despacho del  Ministro o Ministra, las dependencias secundarias de Planeación, la oficina central  del sindicato de docentes y los archivos de la Tesorería Nacional. En buena hora,  varios países de América Latina y El Caribe han puesto en marcha procesos de  consulta ciudadana, bajo la modalidad de “foros permanentes”, “congresos  pedagógicos” o “planes decenales”, todos los cuales apuntan a concertar una  amplia gama de voluntades políticas, sociales y financieras en torno al quehacer  del sistema educativo. En El Salvador, por ejemplo, la reforma iniciada en 1990  surgió de intensas discusiones multisectoriales y recogió iniciativas de muy diverso  origen, con la intención explícita de recobrar la unidad nacional. La movilización y  participación de la ciudadanía en definir las leyes o planes “marco” se ha buscado  y obtenido en grados diversos en Argentina o en Bolivia, en Colombia o en  Honduras, en Uruguay o en Venezuela. Esta actitud de apertura ha logrado  asegurar apoyos de alto valor estratégico. En el caso de Chile, el de los académicos  y los técnicos, lo cual ha contribuido a darle continuidad a las políticas. En el caso  de Paraguay, el de los maestros, cuyos “círculos de estudio” han aportado mucho aldiseño de las reformas y al cambio desde las escuelas mismas. En el caso de  Jamaica o República Dominicana, el de los empresarios, que han inspirado y  promovido la puesta al día del sistema educativo. En el caso de Brasil, de Costa  Rica o de México, el de las ONGs locales que desarrollan prototipos y facilitan la  comunicación entre los investigadores, el público y el gobierno.

La política educativa es, por definición, una política de largo plazo. Ahora bien:  bajo un régimen democrático, la única manera de asegurar la continuidad de las  políticas es dotarlas de una legitimidad sólida y una base de apoyo social amplio,  bien informado y dispuesto a defenderlas (la política educacional del Chile  democrático es un ejemplo notable de estabilidad,  Así, la concertación transparente es condición necesaria para que cualquier proyecto educativo llegue a ser una práctica duradera y capaz de producir los resultados previstos. Se dirá, por el contrario, que en la educación abundan las prácticas duraderas que jamás fueron materia de discusión ni consenso. Pero éstas, cabalmente, son las prácticas de “apropiación privada”.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

 

González, M. A. (2012). Módulo. Contextos Políticos y Educativos en América Latina. S. l., Colombia: Unad.

J. C. Hidalgo (1996): Financiamiento de la Educación Superior.,  Conferencia Regional sobre Políticas y Estrategias para la Transformación de  la Educación Superior en América Latina y El Caribe, Cresalc-UnescoMinisterios de Educación Superior de la República de Cuba, La Habana.. A. Silva, editor (1996):

                  Rojas Vásquez, Armando José; Núñez Nava, Rosa Virginia. (2009). El matiz fenomenológico en Ernesto Sábato. Revista de Artes y Humanidades UNICA, Mayo-Agosto, 78-99.